Después de un par de semanas de parón y de obligado descanso, nuestro espacio público a través del blog vuelve a su dinámica habitual. El tiempo que ha pasado desde nuestra victoria en las pasadas elecciones locales nos ha permitido mirar con perspectiva de dónde venimos y hacia dónde queremos ir.
Después de más de dos décadas de un gobierno monocromático, absolutista y cortijil pretenden hacernos creer que las mayorías absolutas son un cáncer para la sociedad. Lo fueron, en Torrelodones, cuándo aquellos que gobernaban llegaron a pensar que el jardín de su casa alcanzaba los límites periféricos del municipio. Pero eso es historia.