El pasado domingo acabaron una de las dos fiestas patronales que hay en Torrelodones, las fiestas de la Virgen del Carmen. Cada año nos queda un poco esa sensación de satisfacción por lo que ha salido bien, y frustración – a pesar del enorme trabajo que suponen- de que podía haber salido mejor. Pero, sin duda, estas han sido unas muy buenas fiestas.
Nuestro objetivo con las fiestas es que sean de marcado carácter familiar, que respeten la convivencia y que sirvan de esparcimiento para todos. Objetivos nada nimios, por cierto.